A nivel mundial, agosto se conoce como el Mes del Corazón, instancia impulsada para reforzar la alerta ante enfermedades cardiovasculares, entre las que destacan la hipertensión, el infarto al miocardio, las arritmias, entre otras.
Pero lo que no muchos conocen es la existencia del cáncer de corazón, tumores malignos poco frecuentes, pero que tienen una tasa de supervivencia muy reducida.
Esta patología se produce cuando un tejido anormal crece en el corazón (tumor primario) o, en otros casos, se disemina hacia el corazón, denominado tumor metastásico o secundario. Aunque es un tumor extremadamente raro, con una incidencia menor a un 0,3% de la población, hay que prestar especial atención por la gravedad de su evolución.
Al ser un cáncer poco frecuente, se desconoce con precisión los factores de riesgo y quiénes tienen más probabilidades de padecerlo. En Cleveland Clinic apuntan a que cualquier persona puede tener cáncer de corazón, pero es más probable que aparezca en hombres que en mujeres. Y de estos, las edades en las que más se desarrollan son de los 30 a los 50 años.
El angiosarcoma es uno de los cánceres cardíacos más frecuentes y que destaca por ser un tumor maligno agresivo con crecimiento rápido. En este sentido, los científicos creen que algunas personas son más propensas que otras a padecer este tipo de enfermedad debido a sus genes. Así, podría afectar a varios miembros de la misma familia a causa de una mutación en el gen conocido como protección de la proteína 1 de los telómeros (POT1, por sus siglas en inglés).
Síntomas tempranos
Uno de los principales síntomas del cáncer de corazón es la insuficiencia cardíaca, que se manifiesta por un pulso irregular o rápido. Si el tumor está presionando una cavidad del corazón, también se puede presentar fatiga.
Además de una arritmia cardíaca, desmayarse también se considera una advertencia para los afectados por esta enfermedad. El dolor en el pecho es otra de las señales más comunes en los tumores cardíacos, aunque deberá consultarse con un especialista puesto que este síntoma también se encuentra en otro tipo de cánceres.
Ningún órgano o tejido está libre de cáncer
El cáncer es una enfermedad que se produce cuando las células se multiplican sin control y se diseminan a los tejidos que las rodean, lo que desemboca en un tumor. En este sentido, cualquier célula del cuerpo puede dar lugar a cáncer.
Sin embargo, existen algunos que son más frecuentes que otros ya que hay células que se malignizan con mayor facilidad. Parte de la explicación puede encontrarse en factores hormonales, que contribuyen a que determinados cánceres, como el de próstata o el de mama, sean más frecuentes; así como en la exposición a determinados tóxicos, como el tabaco, que puede favorecer el desarrollo del cáncer de pulmón, entre otros. También hay casos en que la genética puede ser determinante.
Los cánceres raros son poco frecuentes por cada uno de ellos, pero si se contabilizan en su conjunto, representan aproximadamente el 24% de todos los casos diagnosticados. Por ello, al igual que sucede con el resto de enfermedades raras, es relevante otorgarles un espacio en la investigación, dar visibilidad y fomentar la puesta en común de recursos para las enfermedades de baja incidencia.